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Arquitectos: Elisabetta Carnevale Arquitectura De Terra
- Área: 112 m²
- Año: 2019
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Fotografías:André Roseira Costa
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Proveedores: AutoDesk, Com Cal
Descripción enviada por el equipo del proyecto. El centro de yoga MIBI, en la planta baja de un edificio residencial, ha sido realizado con con bloques de tapia (tierra compactada). Es el primer proyecto que utiliza esta técnica en el área metropolitana de Barcelona.
La tapia ha sido ampliamente utilizada en la arquitectura vernácula de esta región, y vuelve hoy a ser utilizada por sus numerosas calidades. La tierra es un material con muy baja huella de carbono, a diferencia del cemento; es un recurso natural, disponible localmente y es completamente reciclable.
Concepción de los espacios
El plano contrapone a la organización ortogonal del edificio existente un conjunto de líneas diagonales, que guían a los usuarios de la recepción hasta la terraza trasera. Dos líneas de luz rasante acompañan este recorrido, resaltando la textura de las paredes de tierra y creando una atmósfera íntima. La masa de las paredes de tierra contrasta con su parte superior acristalada, que aporta luz natural. El juego de aberturas deja percibir la terraza trasera desde el exterior.
La recepción ha sido diseñada como un espacio particularmente luminoso, gracias a múltiples fuentes de luz directa e indirecta. Los muebles de madera fueron diseñados para seguir las líneas diagonales del espacio. En el suelo, dos materiales diferentes marcan el límite entre la recepción, con pizarra natural, y la zona de yoga, donde la gente camina descalza, con parquet de bambú.
En el salón multifuncional las personas descalzas, sentadas o tumbadas en el suelo pueden ver y tocar las superficies de madera, tierra y bambú. En la parte interior del centro de yoga se encuentra la sala de masajes.
La concepción de los espacios sigue los criterios del Feng Shui, y la zona más favorable para la sala de psicoterapia resultó ser la esquina del edificio, detrás de dos escaparates. Para posicionar un espacio tan íntimo a pie de calle, se realizaron dos paredes de tapia en la parte inferior de los escaparates. Se ha creado así una sala envolvente y cálido, definida por cuatro paredes de tierra, y se ha materializado la presencia de la tierra en el exterior del edificio, caracterizando fuertemente la esquina de la manzana.
Concepción bioclimática
La elección de la tierra es parte de la concepción bioclimática del local. Como material de alta masa térmica, la tierra atenúa los picos de temperatura a lo largo del día, y además regula la humedad del aire interior.
El resultado es un local ecológico y acogedor, que refleja el papel del centro MiBi: un refugio de salud, bienestar y consciencia.
